Te presto la ropa?

     Muchas veces en esos chats que una se dispone  a contestar cuando tiene algún tiempo libre, ya sea en las redes sociales o en las páginas de citas o encuentros sexuales (más ésto que lo anterior) se nos presentan personas (En su mayoría hombres cis) que, cual pavos reales desplegando su cola, nos prometen que nos harán cosas típicas de macho alfa,  como ser: que te pondrán en ciertas posiciones (Que sólo a ellos les resulten cómodas  pero que tan sólo funcionan en las películas porno) y generalmente son frases con verbos imperativos donde hacen promesas de políticos pero luego terminan tirándose boca arriba esperando que la Madama cumpla todo como si fuera su obligación y que al final recibirá dinero por lo sucedido. 
     Suele suceder que a veces se atajan diciendo: no tengo plata (como si el hecho de que una tenga sexo montada signifique ejercer la prostitución y no algo con lo que una se disfrute a la hora de tener relaciones). Es así como dicha rutina se va repitiendo con una buena cantidad de consortes, pero hay una veta o una clase de éste tipo de machos que tímidamente y sin conexión alguna en el medio de los chats previos al encuentro termina preguntando: no te sobra una tanga?
     Es bien sabido que tener sexo con una persona montada, ya sea cross, trans, drag, etc. Lleva al otro a liberar todas sus represiones, desde sacar la bolsita de falopa sin preguntarte si te incomoda o no, armar un faso o hasta vestirse con lencería, no es necesario que el varón que use la lencería lo haga con fines de "ser la mujer" del acto ya que eso no le presta necesidad a quitarle su condición de macho. Recordemos que para las mentes más básicas el macho es el que "la pone", el fuerte, y la hembra es "la que recibe" la débil, pero para lxs que no tenemos una proyección tan bidimensional de las cosas sabemos que esas estructuras están en desuso y solamente una persona con la mentalidad del siglo XVI lo podría sostener.
     Volviendo al tema de la tanga, cuando nuestra respuesta es sí, la tónica de la conversación cambia radicalmente donde ya todo se centra en torno a esa, y para nosotras que es algo bastante común el hecho de usar lencería, nos puede resultar un poco aburrido. Pero es entendible que esa persona que se desespera es porque una vez cada tanto puede hacer uso de éste utensilio. Ya sea que no se compra su propia lencería por vergüenza, porque está casado en una relación rutinaria que no puede cortar porque se pone mucho en juego y el hecho de que a él le descubran una pieza de lencería puede llegar a ser fatal para su relación amorosa.
     Hay que reconocer una cosa y es que parecería que la "ropa para hombres" se diseña con el objetivo de ser odiada, ya sea las telas rústicas o de mala calidad. Los boxers que pican y muchas veces son holgados haciéndolos poco erógenos a la vista, las medias que son arriba de los tobillos, y podría seguir enumerando (por fortuna todo ésto está cambiando). En cambio la lencería y "ropa de mujer" (Si, la lencería es un tema aparte) es droga pura, una vez que sentís su textura en tu piel es imposible volver al boxer holgado. Siempre se empieza por la tanga porque es lo que más se siente. La mayoría de los hombres que están con cross/trans/no binarixs/drags se afeitan la entrepierna, mientras que es más inusual que se afeiten las piernas, porque de seguro las medias de red serían la segunda prenda más solicitada en éstos encuentros. Ahí notamos que la persona que viene a nuestro encuentro al ponerse la prenda sufre una conversión, su rostro cambia y a veces les puede  funcionar como viagra natural, a veces se convierten en "machos alfa" -entangados- y otras los convierte en la persona más sumisa, como a los perritos cuando les acaricias la panza.
     Personalmente soy de las que las prefieren que la otra persona se presente con un boxer ajustado y medias de fútbol (será para exorcizar ese deporte que detesto tanto), pero me gusta ver cuando un varón se vuelve más sumiso y rompe la estructura de la bidimension (léase entrepierna peluda + boxer holgado o peor aún,  slip).
     A las que no les seduce un varón con lencería (aclaro: varón cis, los varones trans van con todo, tengo fascinación por ellos) les sugiero que salgan de lo unilateral y prueben jugar, llega a ser interesante y hasta divertido, háganlo aunque sea como algo lúdico como para salir de la rutina. Y otra cosa más que importante, compren una tanga en once exclusiva para ellos y guárdense la lencería buena para ustedes.